La comprensión general del "Karma" tal y como lo conocemos es la inevitable reacción consecuente de nuestros actos. Cada movimiento está incluido en esta ley universal de la dinámica energética, no sólo nuestros actos, sino también nuestros pensamientos, nuestras palabras y la frecuencia de nuestras emociones más actuales. También refleja no sólo nuestra conciencia, cuando nos damos cuenta de lo que estamos haciendo, sino sobre todo a nivel subconsciente, la parte que descuidamos tan a menudo.

Hay una lección importante que aprender en la rueda del karma, como en todo en la vida, ya que nada se crea al azar. Demuestra claramente cómo somos responsables de los resultados, cómo creamos la vida y todas las situaciones, y cómo afectamos al entorno y a las personas que nos rodean. Es, por tanto, una llamada de atención.

Dependiendo del nivel de comprensión, se ha catalogado frecuentemente como una especie de castigo. Si haces el "bien", recibes el "bien" a cambio, pero si haces el "mal", el "mal" o lo peor es exactamente lo que recibirás. Si pensamos en términos de dualidad, o de conciencia tridimensional ese es exactamente el caso. Pero cuando trascendemos en conocimiento, frecuencia y conciencia, y la dualidad comienza a desvanecerse, la lección es de mucha mayor importancia. Cuando finalmente comprendemos que no hay juicios, que no hay "buenos" o "malos", sino sólo oscilaciones de energía, con sus respectivas funcionalidades, todo se convierte en una oportunidad para aprender, y para "subir la escalera" de la evolución de la conciencia.

Si añadimos la reencarnación, la cosa se pone aún más interesante. El Dr. Brian Weiss, experto mundial en reencarnación y autor de muchos bestsellers como "Muchas vidas, muchos maestros" o "Sólo el amor es real", afirma que "el karma no es un castigo, sino una oportunidad para aprender nuestras lecciones. Si las lecciones no se han aprendido en una vida anterior, volvemos para trabajar en ellas. Las lecciones son sobre el amor, la compasión, la no violencia, la paciencia y la comprensión, el no prejuicio, etc.". (Hay House, "ENTREVISTA INTIMATIVA CON EL DR. BRIAN WEISS - BRIAN L. WEISS").

A través de la reencarnación, estamos dando la oportunidad de experimentar la vida a través de todas las perspectivas. El verdadero aprendizaje y la comprensión provienen de la experiencia, de sentir y vivir el "otro lado". Muchos factores kármicos se basan en preconceptos, como el racismo o cualquier otro tipo de discriminación, cualquier cosa que lleve al odio, al juicio ciego o a la falta de aceptación del derecho al libre albedrío de los demás. A través de este mecanismo, experimentamos diferentes culturas, religiones, géneros, etc. Si nos pasamos la vida discriminando una determinada religión y cultura por ejemplo, que de hecho es un tema muy dominante en la actualidad, en la próxima vida esa es exactamente la vida que experimentaremos, desde la perspectiva del "objeto" de enfoque equivocado. Si dejamos de lado nuestras emociones actuales, es bastante lógico y razonable.

En conclusión, el Karma sólo sirve para la evolución de nuestra conciencia, nuestra evolución del Ser y del conocimiento. Como me dijo una vez una persona sabia "siempre que sientas que estás pagando una deuda en tu vida, siéntete feliz y bendecido, ya que pronto tendrás la oportunidad de volver a empezar." Sirve al Amor por encima de todo. Es el camino universal hacia el Amor incondicional, hacia la unidad del alma, por el respeto y la inteligencia empática. Al abrazar nuestros karmas, evolucionamos, crecemos como piezas divinas e infinitas de la Fuente energética suprema.